'Palm Spring'

Max Barbakow renueva la clásica comedia romántica 'Atrapado en el tiempo'

PELÍCULAS

ADRIANA GARCÍA TRIVIÑO

4/12/20242 min read

De la comedia romántica ‘Atrapado en el tiempo’ llega ‘Palm Spring’ con un tono renovado y encantador gracias al guionista Andy Siara y el director Max Barbakow. Este extraordinario, y primer, largometraje de Barbakow ofrece la novedad de que, esta vez, son dos jóvenes que reviven el mismo bucle. A pesar de no haberse llevado ninguna de las nominaciones a mejor película de comedia y mejor actor de comedia, este film nos da nuevos aires de la clásica y antecesora comedia romántica (‘Atrapado en el tiempo’).

Más de una ha tenido el incesante deseo de cambiar el pasado o de vivir las múltiples realidades de una misma situación. ‘Palm Spring’ nos da la oportunidad de (re)vivir el mismo día e incluso, de recobrar las ganas de subsistir entre la cotidianidad. Del arte de pasar de todo, y hacer como si nada importara, el sinsentido de la vida se impone en el camino de nuestros protagonistas. En cuanto empiezan a vivir como si no hubiera un mañana, pronto la rutina les llevará de formas diferentes a la hora de afrontar el día a día.

Habrá quienes hayan sentido que ya han vivido en ese bucle (lo vimos con la pandemia). En cambio, la rutina favorece a la nueva relación que se estrecha entre ellos. Esta sería la salvadora (como el amor redentor de las historias clásicas) de los personajes que podrían estar viviendo en una especie de limbo. Ya se dejaba entrever en el cartel al incluir a una cabra que, según el significado que se le ha otorgado desde la Biblia, es la pista que se nos da de antemano de que son pecadores y eso fue lo que les llevó a caer en ese bucle temporal (o limbo).

La representación que hace del amor se basa en el psicoanalista francés Jacques Lacan, quien le dio el significado de que el amor es darle algo que no tienes a alguien que no lo quiere. En este caso, ambos se dan la promesa de un futuro que, en realidad, es un continuo presente. En una sociedad donde el individualismo prima y envenena las nuevas relaciones, este filme nos da otra lección porque, a pesar de lo que dijo en su día Ortega y Gasset con que “yo soy yo y mis circunstancias”, las cosas que hacemos sí que importan y (nos) afectan.

Sarah (interpretada por Cristin Milioti) nos deja una frase que refleja que todo es imprescindible, pero que, al mismo tiempo, somos responsables de nuestros actos y entre ellos está el elegir con quién queremos compartir el resto de nuestros días, a pesar de que se vivan en un constante presente.